Los invernaderos son estructuras que se usan para cubrir y proteger plantas. Se pueden construir de una amplia variedad de materiales, y su diseño y tamaño pueden variar según las necesidades de las plantas que albergarán. Los invernaderos pueden usarse para cultivar una variedad de plantas, y también se pueden usar para proteger plantas sensibles del clima. Tienen muchas ventajas. Proporcionan un ambiente cálido y húmedo para que las plantas crezcan, y protegen a las plantas sensibles del clima. También pueden ayudar a controlar la cantidad de luz y el riego que reciben las plantas. Sin embargo, los invernaderos también tienen algunas desventajas. Pueden ser costosos de construir y mantener, y pueden requerir una gran cantidad de energía para mantener el ambiente adecuado para las plantas. También pueden ser propensos a la acumulación de calor, lo que puede dañar las plantas.
¿Por qué cultivar en invernadero?
Desde tiempos inmemoriales, el hombre ha cultivado en invernadero para proteger sus cultivos del frío o del calor extremos, del viento o de la lluvia. Hoy en día, el invernadero sigue siendo una herramienta muy útil para los agricultores, ya que les permite cultivar plantas en un ambiente controlado. Aquí te contamos algunas de las principales ventajas de cultivar en invernadero. La principal ventaja de cultivar en invernadero es que permite proteger los cultivos del clima. En lugares donde las temperaturas son extremas, ya sea porque hace mucho calor o porque hace mucho frío, el invernadero mantiene un ambiente constante y protege las plantas de las condiciones climáticas adversas. De esta forma, se pueden cultivar plantas que de otra forma no podrían sobrevivir en ese clima. Otra ventaja de cultivar en invernadero es que permite un mejor control del suelo. En un invernadero, el agricultor puede controlar la temperatura, la humedad y el nivel de nutrientes del suelo, lo que facilita el cultivo de plantas que requieren unos cuidados especiales. Por último, cultivar en invernadero también permite un mejor control de las plagas y enfermedades. Al estar las plantas protegidas del exterior, se reduce el riesgo de que sean infectadas por plagas o enfermedades. De esta forma, se pueden cultivar plantas más sanas y resistentes.
Oportunidad de cultivar todo el año
Ya que en el invernadero se tiene relativa independencia del medio exterior es viable tener producción en cualquier temporada del año. Da igual si el invierno es muy frío o si el verano trae consigo elevadas temperaturas, la producción es posible.
Para el primer caso se puede llevar a cabo la calefacción y para el segundo la ventilación y la refrigeración. De esta manera, al emplear las bodegas, es viable generar sin interrupciones por las condiciones climáticas. Podemos destacar que en un invernadero todo es viable, solo hay que investigar los costos económicos.
Virtudes de un invernadero
Entre las virtudes tenemos la posibilidad de poner énfasis las próximas:
- Mayor producción. Al poder supervisar las propiedades del ambiente, es viable progresar el desempeño del cultivo.
- Menos peligro de pérdidas. El cambio climático es una situación que perjudica un año tras otro a varios cultivos, que están a la merced de fenómenos naturales indecifrables y al azar.
- Control de anomalías de la salud y plagas. Un invernadero hermético, con una composición sólida, deja el control de plagas con un empleo moderado de fertilizantes.
- Cultivo para toda la temporada. Al no depender del exterior, es viable cultivar cualquier género de cosecha en cualquier temporada del año. Esto deja conseguir artículos fuera de temporada que se tienen la posibilidad de vender a costes mucho más superiores.
Entre las virtudes que proporciona el cultivo en invernadero es el control de las condiciones climáticas para garantizar un mejor avance de la planta.
Entre los causantes climáticos que influyen en el cultivo y la producción está la temperatura, que debe oscilar entre los 18-25 °C a fin de que la planta se expanda apropiadamente y genere frutos (Véase la tabla que sintetiza los requisitos de temperatura para las distintas especies). Abajo o sobre esta temperatura perfecta la planta no se logra desarrollar apropiadamente y posiblemente el cultivo no realice su período biológico habitual y no alcance su máximo potencial de desempeño.
Además de esto, la temperatura interfiere (adjuntado con otros componentes como el CO2, la iluminación, etcétera.) en algunas funcionalidades como la apertura o el cierre de los estomas, que son fundamentales para los procesos vitales de fotosíntesis, transpiración y respiración de la planta.
Empleo mucho más eficaz de los insumos:
Con técnicas como la fertirrigación y la hidroponía es viable dar a las plantas solo los elementos que precisan en todos y cada etapa de su avance, con lo que solo se usan los fertilizantes precisos, achicando el despilfarro, que en el final piensa un gasto. Lo mismo sucede con el agua, en tanto que las instalaciones modernas de los sistemas de riego dejan su empleo mucho más eficaz, en este sentido hago referencia al riego localizado o de precisión (por goteo, microaspersión y nebulización).
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Mayor control de plagas, malzas y anomalías de la salud:
A fin de que un invernadero se haga más fácil el control de plagas, anomalías de la salud y malzas debe existir sido adecuadamente desarrollado y construido, siendo en este sentido donde varios de ellos se fallan ya que la hermeticidad del mismo es la clave de un control exitoso. Además de esto, el cultivo en invernaderos facilitaba la programación de las apps, en tanto que es posible supervisar quién tiene ingreso al cultivo.